DEFECTOS DE UN EGO

Mi pasado resulta algo confuso. Incluso para mi.
Tengo recuerdos parciales dentro de recuerdos completos.

Escenas en las que no me reconozco, situaciones a las que no plante cara, conversaciones que me enamoraron desde la primera palabra, y frases que me acompañan todas las mañanas y todas las noches, caricias que aun me hacen estremecer , miradas que hubiera deseado retener, y pensamientos que no debi guardar.
Pequeñas piezas de un puzzle, que ni yo misma me he atrevido a montar, hasta ahora.
Porque mi maraton personal empezo hace ya demasiados años, como para seguir escondida tras esa causa, creo que ya es hora de dejar de correr.

He dejado de huir, porque al fin mis miedos, se resuelven, y mis dudas se vuelven respuestas, porque ya no tiene sentido asustarse de un anciano lobo feroz, porque me aburrece necesitar un espejo para mirar el pasado.
Quiero darme la vuelta y mirarle a la cara, quiero poder levantar el dedo en mi propia contra y señalarme orgullosa en el pasado de alguien, en alguna de tantas situaciones insalvables, en mente de aquellos a los que yo tambien dañe, en la mirada de los que un dia la apartaron.
Quiero hacer saber, necesito hacerle saber, que al fin, comprendi aquellos silencios en sus palabras, que entiendo la frialdad en sus ojos, decirle que parte de él, quedo en mi, y me gusta.
Confesar que acepto la soledad que me ha tocado vivir.

Si en algun momento de mi vida, me hubiera permitido creer en el destino o en algun Dios, ahora, mi vida, solo tendria el significado diario de culparle a el.
Si no hubiera empezado a huir, ahora no me recriminaria cuanto he perdido por el camino.
Si llego a quedarme, se que hoy, yo, no estaria aqui.
Porque no estaba preparada, porque aun era incapaz de aceptar demasiadas cosas, y mucho menos de comprenderlas.

Ahora, las cosas, toman sentido y forma por si mismas, acabando de completar mi viejo puzzle abandonado, dandole colores, texturas, y al fin, sentido.